Comisiones Obreras de Extremadura | 19 abril 2024.

El necesario papel de las mujeres en la empresa

    Encarna Chacón. Secretaria general de CCOO de Extremadura

    05/06/2017.

    La incorporación de las mujeres al ámbito laboral, ya sea como trabajadoras o empresarias, es una realidad incuestionable. Se trata de un proceso paulatino y creciente, en el que hay que mantener los esfuerzos para seguir consolidándolo, porque aún hay mucho por hacer.
     
    En nuestra región, nos encontramos que la tasa de actividad de las mujeres, es decir aquellas que trabajamos o las que han mostrado su intención de trabajar y estamos en edad laboral, ha aumentado desde el 2002 un 11,76% mientras que la tasa de actividad en los hombres ha descendido en este mismo periodo un 1,63%. Este descenso en los hombres es fruto de la destrucción de empleo en Extremadura.
     
    No obstante, esta mayor incorporación de las mujeres al mundo laboral se ha producido en un contexto de precariedad. La crisis económica de 2008 no ha hecho más que acelerar el proceso de la precarización del trabajo, siendo las trabajadoras las que estamos más afectadas, perpetuando las desigualdades de género.
     
    Las soluciones que se han dado para salir de esta crisis, como son las políticas de recortes y la Reforma Laboral puesta en marcha por el Gobierno Central, son nefastas para las mujeres. Así, ahora tenemos mayores tasas de paro femenino, mayor temporalidad, mayor parcialidad en las jornadas de trabajo y una segregación ocupacional que relega a las mujeres a sectores y puestos peor remunerados y con peores condiciones laborales. Esto también da lugar a una brecha salarial entre hombres y mujeres que asciende al 16,4% en nuestra región (véase el estudio ?Análisis de la brecha salarial de género en Extremadura? publicado por CCOO Extremadura el año pasado)
     
    Para combatir esta situación de desigualdad, desde Comisiones Obreras de Extremadura vamos a seguir reivindicando a los partidos de izquierda la derogación de la Reforma laboral y seguiremos reclamando y luchando por un empleo de calidad, incluyendo en la negociación colectiva cláusulas de acción positiva para la promoción y formación de las mujeres y negociando planes y medidas de igualdad en las empresas. Por otro lado, es fundamental que el Gobierno de nuestra región desarrolle la Estrategia de Conciliación y Corresponsabilidad y la Estrategia de Igualdad Salarial comprometidas en la concertación social, que nos conduzcan a un mundo laboral más igualitario.
     
    En cuanto al papel de la mujer empresaria en nuestra región, la segregación ocupacional, es también la responsable de que haya pocas mujeres en puestos directivos y de responsabilidad. Según el estudio de Informa D&B ?Presencia de mujeres en la empresa española? (marzo 2017), de las 161 sociedades extremeñas estudiadas y que están obligadas a alcanzar una presencia equilibrada de mujeres y hombres en su Consejo de Administración, sólo el 21,12% de estas cumple la Ley de igualdad efectiva entre hombres y mujeres.
     
    Por su parte, de las 20 sociedades extremeñas estudiadas obligadas por ley a elaborar un Plan de Igualdad por tener más de 250 trabajadores y trabajadoras, sólo en 4 de ellas hay más del 40% de mujeres en sus Consejos de Administración, lo cual supone el 20%.
     
    Estos datos muestran que los niveles de cumplimiento de la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la Igualdad Efectiva entre Mujeres y Hombres, que ahora cumple diez años desde su entrada en vigor, siguen siendo muy bajos, con porcentajes de representación en Consejos de Administración estables desde hace años e incluso con empresas que todavía no cuentan con ninguna mujer ejecutiva.
     
    Por tanto, podemos apreciar que el aumento de la presencia de mujeres en puestos de dirección es lento e inferior al que se da en otros sectores de la sociedad. Esto exige inevitablemente un cambio de mentalidad por parte del empresariado para acabar con el llamado ?techo de cristal?, que impide a las mujeres acceder a los puestos de mayor responsabilidad. Sin embargo, en otras organizaciones, como las del sindicalismo de clase, se está consiguiendo traspasar esa barrera.
     
    En cuanto al emprendimiento femenino, fomentado por los altos niveles de desempleo y la baja calidad de los empleos existentes en nuestra región, el Informe GEM 2003-2011 arroja los siguientes datos:
               
    El número de emprendedoras potenciales en Extremadura, es decir aquellas que están considerando emprender un negocio (6,70%) es inferior al de los emprendedores (9,40%), aunque su crecimiento en los últimos nueve años ha sido del 67,5%. Y lo mismo sucede con las empresarias consolidadas, que han crecido un 42,30% y aunque aún no llegan al nivel de los hombres.
     
    Desde CCOO de Extremadura, como sindicato de clase, sociopolítico y feminista, priorizaremos la lucha para la eliminación de las discriminaciones en el mundo laboral y reivindicamos el papel de las mujeres y su talento en las empresas, como en otros espacios públicos, para alcanzar una sociedad cada vez más justa e igualitaria.