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Sordo ha indicado que, a corto plazo, el Gobierno tiene que derogar la reforma laboral que impuso la derecha, “pero no para devolvernos a la situación anterior donde hay que recordar que la temporalidad era de más del 30%”, sino para aprobar una nueva legislación que apueste por la calidad en el empleo, la formación y la adaptación a las nuevas realidades.
“Las reformas de hace una década se hicieron para devaluar salarios. Estas reformas tienen que derogarse, pero no nos vale con la simple derogación, necesitamos un modelo laboral mucho más justo y solidario, donde la precariedad laboral se reduzca drásticamente y donde los despidos no sean la fórmula para ajustarse a los ciclos económicos”, subrayó.
Del mismo modo, reclamó el alza del salario mínimo interprofesional. “No podemos salir del 2021 con el SMI congelado, no solo porque la gente con 950 euros brutos va muy justa, sino porque se lanza un mensaje pésimo para la gente más humilde. España ha sufrido mucho en la crisis, pero no puede cerrar el 2021 creciendo un 6% y mantener el SMI congelado”, indicó.
En cuanto al sistema público de pensiones, cuya reforma está en cuestión en estos días, defendió que la población necesita “certidumbres” y que, si se hiciera una encuesta entre la gente menor de 45 años, la mayoría pensaría que no iba a poder tener pensiones públicas suficientes. “No hay motivo para pensar así, habrá pensiones si hay voluntad política y recursos para que las haya”, concluyó.
En todo caso, Unai Sordo invita a pensar a largo plazo y una reflexión política profunda para alcanzar un nuevo contrato social desde parámetros de justicia social, con una fiscalidad suficiente, con trabajo digno y con derechos, un modelo sostenible medioambientalmente y afrontando retos como la digitalización de la economía y cómo afecta eso a las condiciones de trabajo.
Valora que España debe salir de la pandemia con “un nuevo tono vital” y para ello hay que dar respuestas a la población que realmente atienda a sus problemas. El auge del neofascismo lo sitúa precisamente en su capacidad para aprovecharse de las inseguridades de la población, culpando “al que viene detrás de mí”. Ante esto hay que responder con más cohesión, más recursos en común, con servicios públicos más fuertes y mejorando la convivencia.
En esa línea puso el foco en la necesidad de confiar en la agenda social progresista y en las propuestas que se plantean desde el sindicalismo. “España solo puede salir de esta crisis con las ideas que están planteando los sindicatos”, reseñó en su intervención.
El secretario confederal de CCOO ha puesto el valor labor de los trabajadores y las trabajadoras durante toda la pandemia y del propio sindicato. “En un momento en el que nos hemos enfrentado a un reto inédito el sindicato ha respondido con nota, toda la organización ha estado donde tenía que estar, respondiendo a los problemas de la clase trabajadora”, destacó.